FUIMOS LA NADA
Fuimos la nada.
Después la oscuridad y el silencio.
Fuimos gas y fuimos fuego.
Caldo universal y minerales.
Célula única y mutante.
Hasta fuimos peces y género.
Y también fuimos animales y misterio.
Fuimos las guerras y hambrunas.
La civilización y barbarie.
Ciencias, culturas y religiones.
Y hasta algunas que otras veces,
habremos sido verdades.
Fuimos de un ayer despiadado.
Y de este sol que aún nos arde.
Fuimos hijos y fuimos nietos.
Y aún estamos aquí,
siendo abuelos y siendo padres.
Somos dolor y esperanza.
Amor y sosiegos.
Dudas y remembranzas.
Somos presentes imperfectos
de futuros inimaginables.
Somos algo que se sabe vivo.
Pero seguros de nada…
Que será fuego y ceniza.
O tal vez tierra enraizada.
Que tal vez será desierto sin huellas.
O que simplemente de nuevo,
volverá a ser la nada…
Ignatius Bor.