¿PRESENTIMIENTO…?
(¿O Cambio de Civilización?)
La rueda puso en marcha al mundo, a la tecnología y a todo aquello que vino después y que los humanos bautizamos como el ingenio y el adelanto.
Pero para resumir, sin remontarnos demasiado hacia atrás en la historia de la humanidad; y dando algunos de los ejemplos más contundentes, recordemos como las Carabelas y los espejos asombraron a los indios americanos.
Como los barcos y la locomotora a vapor unieron y modificaron el comercio mundial, como los aviones revolucionaron el turismo y como internet revolucionó y modificó las costumbres y culturas de esa humanidad que comenzó a girar con aquella rueda.
Y que hoy está permanentemente interconectada entre sí, sin importar ya en qué parte del mundo o del Universo se encuentre.
Los que llegamos a alumbrarnos con el antiguo sol de noche y llegamos a ver como, por ejemplo, nuestros abuelos y/o padres comían de lo que cultivaban y criaban en sus chacras, o en los fondos de sus casas.
Los que llegamos a ver cómo se cazaba y pescaba en campos y arroyos, aún no contaminados, no por deporte si no para alimentarse de esas prácticas. Y que hoy hablamos por whatsapp, escribimos con abreviaturas, o asistimos a la ya casi desaparición del idioma y la escritura, que fueron quizá el mayor milagro y pilares que lograron diferenciar a la humanidad del resto de las especies, ya que a través de ellos pudo explicar, expresar y hasta si se quiere dibujar de alguna manera sus sentimientos más profundos. Somos los que asistimos hoy estupefactos al dolor que provoca ver el retroceso de este maravilloso avance, ante el intento de imponernos, por ejemplo, un vacuo Idioma Inclusivo.
Y cómo la pérdida de la creatividad y la magnificencia de la Música, de la Escultura y de otras artes, para las cuales ya no se necesitan ni el talento ni la mano humana, son otras de las transformaciones cognitivas que ahora también son reemplazadas y facilitadas por la tecnología.
Por todo esto creo que estamos asistiendo a lo que me animaría a llamar, ya no un cambio generacional, ni de era, o ni tan siquiera, incluso, a un cambio de época, si no que creo que estamos asistiendo a un “Cambio de Civilización”!
La velocidad con que se produjeron las transformaciones en estos últimos 30 años me llevan a suponer que las costumbres y culturas del hombre actual, en apenas algunas décadas, serán vistas y estudiadas como siguen aún siendo estudiadas las de los cavernícolas de comienzos de nuestra humanidad.
Y quizá hasta la poesía sea centro de debate de expresiones sentimentales ya arcaicas, como si se tratara de jeroglíficos o pinturas rupestres a descifrar.
Incluso a falta de su necesidad, vayan desapareciendo la imaginación, el presentimiento, el razonamiento y quizá también hasta la inteligencia y el amor entre otras condiciones humanas, por lo menos como las conocimos hasta hoy.
Total, si algo piensa y siente por nosotros ¿para qué vamos ya a necesitarlos…?
Noto con horror, como con la excusa de proteger nuestra seguridad, han invadido nuestra intimidad.
Hoy desde cámaras públicas, como así también de manera oculta, nos observan y escuchan las 24 horas del día, ya sea a través de nuestros ordenadores laborales o personales, como desde nuestros teléfonos móviles.
Incluso como utilizando la Inteligencia Artificial (IA) pueden detectar, analizando nuestras expresiones, gestos o tono de voz, desde nuestra identidad hasta nuestros sentimientos.
Y como gracias a fotos o filmaciones subidas a las redes, generalmente sin ninguna mala intención de parte de los usuarios de las mismas, pasamos a ser observados sin nuestra autorización por miles de personas como si fuésemos un GPS público involuntario y sin permiso de instalación.
Quizá las nuevas generaciones serán gustosamente obedientes a los mandatos de la IA. Y esta, a su vez, hasta podría indicarles cuándo y cómo reproducirse.
Hombres y mujeres del mismo sexo ya no solo forman parejas, sino que además crían a sus propios hijos. Algo impensado hasta hace apenas treinta o cuarenta años.
Ya llegamos a la reproducción de humanos, simplemente a través de la manipulación genética de una célula. Pudiendo elegir incluso, desde su color de piel, hasta el de sus ojos.
Y esto sin necesidad del acto sexual. Sin necesidad siquiera de hacer o sentir el amor.
A veces, hasta entre desconocidos.
Me gustaría saber cómo será ese mundo.
Cómo serán las sensaciones y emociones de estos nuevos seres.
Si serán obedientes a los mandatos de esta IA que les dirá, por ejemplo, cuándo y cómo reírse, o incluso ser felices. Cómo será su orden social. Sus costumbres. Sus amores.
¿Si todo eso existirá? …. Y como.
La Naturaleza, Dios, el Todo, o lo que sea (o quien sea), ha creado al hombre y a la mujer con sus distintos géneros y sus sexos, con sus capacidades e incapacidades, sus virtudes y defectos. Con su propia química y su naturaleza.
Y el hombre actual con su ciencia y su tecnología los está volviendo a Mezclar.
¿Tal vez a unir?
¿A volver a un comienzo unicelular…?
Por eso esto no es una crítica.
Es más, lejos está de serlo!
Es si se quiere un gran interrogante.
O tal vez, un simple presentimiento…?
Ignatius Bor.