NI CIERTO NI EQUIVOCADO
La amistad es un camino lleno de flores,
Bajo un sol muy tibio, a orillas de un inmenso mar azul,
Por donde Dios nos lleva de la mano como a dos niños……
La paz salpica tu nombre, tu voz invade mi calma
Y aparece tu estampa libre, tus cosas, y mi escucharlas.
¡Que libres fuimos entonces ¡
¡ Qué locos fuimos, Hermano ¡
Y si ya no llevo en mi alma, palomas libres, de vuelo firme,
de esas que vuelan lejos, donde los vientos lloran y ríen
y ya no peino las noches, con el sueño de partir lejos
( el sueño que estas viviendo )
es que en mi despertó al alba, con un amanecer nuevo,
por el beso de un pimpollo fresco, el sueño de ser enero,
para morir en diciembre, aferradito a su cuerpo.
Pero vas cocido a mi espalda, y así… como vos y garganta
cantamos los mismos versos aun mediando tanta distancia.
Pues cada momento nuestro seguirá siempre creciendo.
Podrá el tiempo borrar las huellas, pero jamás nuestra esencia.
Ni aquellos mismos momentos.
Ni el cuarto aquel confidente, donde las noches nunca alcanzaron.
Donde sonó tu guitarra; y te llore algunas nanas.
Donde escuchábamos música, donde la flaca te amaba.
Y… que si hoy no es nuestro?… que importa …!!!
No importa que otros lo invadan, pues nuestras almas nos guardan
las cosas que les contamos, y como fiel confidentes
seguirán allí calladas.
Un amor mío primero, lejano e inolvidable.
Carlitos con sus proyectos, nosotros siempre volando.
Amigos que ya no existen, y otros… que ya olvidamos.
Vivir por vivir… y un tajo, chamullo casi obligado.
Y aquel verano de Mardel, Pipía y Loco Ricardo…!!!!
¡Cuantas vivencias mi Viejo! ¡Que pena que hayan pasado!
Y no saber que existían palabras que hoy ya son carne,
Y que es tan corta la vida; y la muerte esta tan cercana.
Pero el destino esta escrito, y Yo le puse la cara.
No pude dejar mis cosas, ni a la gente que me ama.
Y en tu camino distinto, “ni cierto ni equivocado “,
te llevaste cosas que quiero, y un poco de mi mirada.
“Y hasta un pedazo de espacio, que algunos llaman el alma.”
Pero nada tengo que reprocharte…
Si al fin también te acompaño…
¡Que grande que seas mi Amigo!
¡Que grande que sos!.. Hermano!
Ignatius Bor.